Los Pirineos que vienen

PirineosUn informe del CSIC augura un aumento de temperatura de entre 2,8 y 4 grados

Javier Ricou – Lleida  

La temperatura subirá en los Pirineos y las precipitaciones serán cada vez más escasas. Lo recoge un informe del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), el primero que aborda de forma seria la amenaza que se cierne sobre esta cordillera por el cambio climático. Con este estudio, los Pirineos entran a formar parte del catálogo de informes sobre otras zonas montañosas como los Alpes o Canadá, donde se respira una mayor preocupación por el futuro que aguarda a esas cumbres.

El informe, dirigido por el investigador del CSIC Juan Ignacio López-Moreno, del Instituto Pirenaico de Ecología, predice un aumento medio de temperaturas en los Pirineos en los próximos cien años entre 2,8 y 4 grados. La primera cifra es la que se augura con un escenario de emisión de gases "medio-bajo", mientras que la segunda se produciría en una emisión de gases "medio-alto". En el primer escenario las precipitaciones descenderían – en el periodo estudiado, que va de los años 2070 al 2100- cerca un de un 11%, mientras que si la emisión de gases siguen aumentado las lluvias y nevadas se reducirían hasta en casi un 15%.

El investigador Juan Ignacio López-Moreno también predice que los efectos del cambio climático sobre la temperatura serán mucho más acusados en la vertiente sur de los Pirineos (la española) que en el lado francés. Y el verano será la época en la que más se acuse el cambio, con temperaturas más altas de las que ahora son habituales y muchas menos precipitaciones.

Estas cumbres, recuerdan los científicos que han elaborado el estudio, "representan la principal área generadora de recursos hídricos de importantes cuencas como la del Ebro, así como refugio de una gran cantidad de especies animales y vegetales endémicas que podrían verse muy afectadas por el clima". López-Moreno reveló ayer que actualmente está trabajando en otro estudio sobre el impacto del cambio climático en los Pirineos durante el invierno.

Las primeras conclusiones se asemejan mucho a los estudios elaborados en los Alpes y Canadá al prever un aumento de temperatura, en los meses más fríos del año, de entre 1,8 y 2,5 grados. "Aquí también hemos calculado ese incremento en función de la emisión de gases", indica el investigador del CSIC. El estudio se ha centrado en una cota de 2.000 metros y el resultado dibuja un Pirineo con dificultades para mantener un modelo turístico centrado sólo en el negocio de la nieve. "Para el periodo comprendido entre 2070 y 2100 se prevé un descenso de los grosores de nieve, en cotas de 2.000 metros, de entre el 30% y el 50%", indica. Según estos datos, el estudio prevé que el tiempo de esquí podría reducirse en los Pirineos, de aquí a final de siglo.

La Vanguardia (17.04.2008)

Sé el primero en comentar en «Los Pirineos que vienen»

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.


*


Traducción »