España, el país de la UE que está más lejos de cumplir con Kioto

No alcanzará lo exigido en el protocolo para 2010 si no aplica nuevas medidas para reducir las emisiones de CO2

MARIA RAMIREZ. Corresponsal

BRUSELAS.- España no se encuentra en posición de dar lecciones verdes enla próxima cumbre de Naciones Unidas sobre el sucesor del Protocolo de Kioto, cuando está a la cola de la Unión Europea en el cumplimiento de losobjetivos acordados hace una década. Entre los 15 países de la UE que aceptaron el texto en 1997 -inclusoconsiderando la mayoría de los del Este, que aún no estaban en la Unión y firmaron por su cuenta-, en 2010 sólo España, Dinamarca e Italia superaránel límite pactado de gases de efecto invernadero, según los cálculos de laComisión Europea publicados ayer. La mayor distancia entre la previsión y la meta, de hasta 15 puntos, será la española.

La vieja Unión se comprometió a cortar sus gases al menos un 8% de mediarespecto a 1990, pero España, por su diferencial de desarrollo con lossocios comunitarios, está autorizada a aumentarlos un 15%.

Sin embargo, con la actual política medioambiental e industrial del Gobierno, la Comisión estima que dentro de tres años sus emisiones de CO2 habrán aumentado más de un 42% respecto al 90. Incluso con algunos trucos permitidos por Kioto, como la inversión medioambiental en otros países, laasistencia a la reforestación o la compra de derechos de emisión, la tasa española seguirá doblando el objetivo si no se producen cambios más agresivos en las políticas nacionales.

España es, de hecho, el Estado de la vieja UE que más está aumentando sus emisiones -tuvo el mayor incremento en 2005, con más de 15 millones detoneladas de CO2-, entre otras cosas porque, con el plan de jubilación de las centrales nucleares, la mayoría de su energía es sucia, es decir, proviene de centrales eléctricas de combustibles fósiles, como destaca el informe de la Comisión.
Además, el estudio atribuye el resultado a «una caída del 33% de la producción de electricidad en las centrales hidroeléctricas debido al bajonivel de lluvias».

El comisario de Medioambiente, Stavros Dimas, reconoció, en rueda deprensa, que «los datos para España no son buenos», aunque aseguró que elGobierno Zapatero es «plenamente consciente de que se necesitan esfuerzos adicionales». «Tenemos que animar a España a que tome todas las medidas necesarias, aunque ya tiene un plan y está trabajando en consecuencia», explicó elcomisario griego, cuyo país quedará incluso un poco por debajo de su marcaautorizada.

Dimas confió en que si se aplican los planes más estrictos de asignaciónde emisiones para las industrias, todos los países puedan cumplir con los máximos permitidos, aunque ninguno está tan lejos como España (losdaneses, según los cálculos, superan el límite un 2% y los italianos un 0,5%). «Espero que lo consigan», afirmó el comisario europeo de Medio Ambiente, quien alabó a España por su inversión en renovables y suprogreso tecnológico en este campo.

Los países que no lleguen a cumplir los compromisos que firmaron en Kioto pueden ser sancionados por una comisión de la ONU con medidas como la prohibición de comerciar con emisiones o una obligación de reducción mayorpara el siguiente periodo o, en este caso, el próximo tratado.

De todos modos, la Unión Europea confía en que la Conferencia Internacional sobre Cambio Climático que se celebrará el próximo mes de diciembre en Bali (Indonesia), siente las bases de un acuerdo global ycompleto para luchar contra el cambio climático después del año 2012, según aclaró ayer el comisario europeo de Medio Ambiente, Stavros Dimas,informa Efe. 

El Mundo, miércoles 28 de noviembre de 2007