Frente a la falsa imagen de un Primero de Mayo nacional-catalanista la realidad de su declive se abre camino entre el movimiento obrero.
Fui a la manifestación del Primero de Mayo en Barcelona y la sensación que tuve fue de una disminución de esteladas respecto al pasado año (los de ERC y los independentistas de UGT: Avalots). Cierto que tampoco puede decirse que fuéramos más manifestantes, seguramente algunos menos. Un lunes festivo crea un mini-puente que anima a huir de la ciudad y la rutina. Esto junto a la caída de la credibilidad de las organizaciones sindicales convocantes genera un panorama desolador.
La presencia de una gran estelada delante de la cabecera era ignorada por la mayoría de los que íbamos en la manifestación. Una vergüenza para los dirigentes sindicales que iban en la cabecera y lo permitieron. Deprimente que la USTEC (sindicato de enseñaza) convoque a los maestros a que vayan a su sede a firmar por el referéndum. ¡Muy deprimente!.
La realidad es que yo y otros muchos vamos hace años a esa manifestación de la mañana en Barcelona con un espíritu reivindicativo y critico frente a los mismos convocantes. Ya hace tiempo que no llegamos hasta la plaza de la Catedral donde los dirigentes sindicales, tan bien alimentados por el poder nacional-secesionistas, sueltan discursos insufribles, además de inaudibles.
Este año unas cuantas organizaciones, Alternativa Ciudadana Progresista, Recortes Cero y, espontáneamente, otras, decidimos quedarnos en medio de la Vía Laietana, frente a la catedral, coreando canciones y mostrando nuestras pancartas. Escuchamos canciones de colectivos iberoamericanos y finalmente acabamos, tras un para de discursos, cantando la internacional.
Yo leí en nombre de ACP, con una bandera republicana en la mano, nuestro comunicado del Primero de Mayo de este 2017, donde hacemos una crítica directa y fuerte al sindicalismo catalán por su sometimiento a los planes del secesionismo y revindicamos una izquierda internacionalista enfrentada a los intereses de las oligarquías mundiales y locales, y cuando digo locales hablo de las oligarquías españolas, todas, incluyendo la catalana.
Creamos un espacio propio para la reivindicación de clase al margen del oficialismo sindical. La calle no es de ellos. La calle ha de volver a ser nuestra. Ayer sentamos cátedra, ayer reclamamos la voz de una izquierda no nacionalista en la principal fiesta reivindicativa de la Clase Obrera: El Primero de Mayo y ya no renunciaremos a ello.
Nou Barris, Barcelona. 2 de mayo de 2017
Vicente Serrano
Presidente de Alternativa Ciudadana Progresista
Hace muchos años que no voy a esa manifestación, por coherencia con mi forma de pensar, no sé que pintan las banderas regionales o repúblicanas en una manifestación digamos que de obreros, esas banderas están bien en otros actos,.
Este año no he podido ir a la de CNT en el Paralelo, las veces que he ido no he visto esteladas, senyeras o tricolores, esas no son símbolos obreros, la roja y negra si.
Vicente: Erais cuatro gatos. Esto no tiene remedio. El nazionalismo esta ganando la partida y co mo, posiblemente, Rajoy despertara y no habrá independencia tendremos que seguir aguantando el coñazo.
Me parece muy natural que la USTEC pida firmas para el referendum. ¿Que esperabais de la USTEC?. El sindicato de los propagandistas del odio con 40 años de experiencia no podía defraudar.
Juan. Cierto cuatro gatos muy ruidosos. Podemos esperar sentados o en casa a ser multitudes por obra y gracia del «espiritu santo». Pero creo que no será muy efectivo. Mas vale ser pocos trabajando que todos en el sofa.
Estoy con Vicente