Amigo Diego: «Fundar un partido que vaya a tener capacidad de incidencia en la vida pública es una tarea muy compleja que se valorará o no en función de las circunstancias.» Fundamentalmente la creación de un partido que quiera desde el principio gozar de las sinecuras y privilegios que tiene el PSC, las ventajas del poder,no es viable de un dia para otro; la creación de un partido que incrementa sus efectivos en función de sus convicciones, su militancia, y su incidència social, con independencia de su mayor o menor incidencia institucional, o sea, tenga o no prebendas públicas, es sobre todo valentia, convicción y decisión politica, porque el sustrato en Catalunya existe. El PSC ha dejado demasiados muertos en las cunetas, en todos estos años. En lo que hace al «exigimos una refundación de izquierdas del socialismo en Cataluña -lo que exige el abandono del nacionalismo-, y hacemos extensiva la denuncia a la deriva socioliberal de los partidos socialdemócratas tanto en España como en Europa» eso aunque suene muy politicamente correcto, si que es complejo y sin querer ser peyorativo,pretencioso. Puedo dar crédito, hasta cierto punto al PSOE, en cuanto permite en su amplitud, la presencia plural, el deseo regerenacionista, la voluntad de izquierdas de base, eso no ocurre con el PSC, que constituye un coto cerrado de señoritos encorbatados de cuello alto, muy a lo progre. El discurso de querer desde la minoria interna, cambiar la orientación de las cúpulas, me lo conozco. Hasta participe de ello en un tiempo. Me suena y suena a hueco y poco creible. De las estructuras actuales de la izquierda, poco se puede salvar, porque le falta lo principal, la voluntad de ser, el creer en lo que predica, y le sobran muchas cosas, la principal la de vivir del cuento, dicho a cara perro. Pero ni el PSOE rompera con el PSC, ni el PSC con el PSOE, lamentablemente, como con la religión que sólo trata de salvar la Iglesia, aqui se trata de salvar la cuota electoral, no de hacerle frente a la derecha. Diego, gracias por el comentario.
Sé el primero en comentar en «Amigo Diego: «Fundar un partido que vay»