Fernando Maura, ex dirigente del PP en e

Fernando Maura, ex dirigente del PP en el País Vasco y número dos de las listas europeas por UPyD, ha llegado a afirmar que su partido no entraría en la Internacional Liberal porque allí se dan cita partidos nacionalistas -se me ocurre pensar en la CDC de Jordi Pujol y Artur Mas- y eso descartaba cualquier vinculación con este grupo de formaciones políticas. ¿Sería ésa la única razón por la que no cabría entrar en la Internacional Liberal? Dicen en UPyD que no se sentirían bien del todo ni en el grupo socialista europeo ni en el popular. Pues tengamos en cuenta que si se deciden por la Internacional de partidos liberales ya se estarían decantando claramente y, por tanto, abandonando la tan cacareada transversalidad por la que abogan los líderes de UPyD. Vamos, que tarde o temprano a la gente se le acaba cayendo la máscara y UPyD ya la lleva medio caída. No mucho antes de la formación del partido, Fernando Savater -del sector más progresista del partido aunque con una influencia indirecta sobre el mismo- advertía en una entrevista concedida a una publicación polaca que en España había espacio para un partido liberal. Son muchos los signos significativos -programa, actividad parlamentaria, márketing…- que nos están avisando claramente de que UPyD se aleja de la izquierda política. Lo de la transversalidad es un artefacto teórico que intenta acallar discusiones comprometidas y proponer una estrategia electoral pretenciosa, pero tarde o temprano, si realmente hay democracia en la formación, se acabará abriendo la caja de los truenos. Los partidos transversales suelen esconder ideas de derecha y extrema derecha, no lo olvidemos. El fascismo empezó situándose en tierra de nadie, con estética y palabrería izquierdosa pero trasfondo ultrarreaccionario. Francesc Macià decía aquello de «ni dreta ni esquerra, Catalunya», y los partidos que en estos tiempos que corren se han decantado por definirse de forma ambigua son engendros tipo GIL y cosas por el estilo. Otros partidos transversales que están en el candelero a día de hoy son los representados por el catalanismo más xenófobo y radicalizado, como la facción histórica de Estat Català, Unitat Nacional Catalana, Partit Republicà Català o Força Catalunya, o bien montajes directamente neofascistas como la Plataforma per Catalunya del ex franquista Josep Anglada. La dirección de UPyD y todos sus afiliados deberían reflexionar sobre todas estas cuestiones porque yo no digo que su partido sea de la guisa mencionada, pero sí que es cierto que la evolución que está siguiendo no convence entre los posibles votantes de izquierdas. Vemos a gente interesante dentro, como pueden serlo Ramón Marcos, Luis de Velasco o el propio Sosa Wagner, pero hay otros datos que no nos están gustando lo más mínimo, y que parecen indicar por dónde va a ir la senda a seguir.