La burocracia impide dar una respuesta rápida al incremento de la demanda en toda España | Entre la aprobación por parte del Consejo de Ministros y el reparto de los lotes pasan cuatro meses
Jaume V. Aroca.- Los alimentos que el Gobierno español decidió comprar en junio del año pasado para las familias necesitadas no llegarán a sus destinatarios hasta mediados de abril.
Diez meses tarda actualmente el Ejecutivo español en hacer todos los trámites para abastecer a las cerca de 7.300 entidades repartidas por toda España que proveen a los necesitados.
Ni el evidente incremento de la demanda de este tipo de productos parece haber logrado estimular a la inquietante máquina burocrática, que bloquea una distribución más rápida.
Entre tanto, los bancos de alimentos de todo el país y las organizaciones benéficas que distribuyen estos recursos han de buscarse la vida -literalmente- en las donaciones de instituciones públicas, privadas y empresas productoras.
Esto es exactamente lo que ha ocurrido con la adquisición de la última remesa de alimentos destinada a este fin. En total, cerca de 41 millones de kilos licitados en concurso público por algo más de 62 millones de euros. Los recursos proceden de lo asignado a España por la Comisión Europea dentro de un programa del que se benefician todos los países de la Unión.
El Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino empezó a tramitar la adquisición de estos alimentos en junio del pasado año. Sin embargo, no fue hasta el mes de octubre cuando se publicó el reglamento de la comisión por el que asignan a cada país los recursos. A partir de ese momento se pudo empezar a tramitar efectivamente la compra autorizada formalmente por el Consejo de Ministros en una de sus últimas sesiones del año pasado, el 19 de diciembre. La adquisición permite abrir dos líneas de compra: por una parte derivados de cereales y, por otra, lácteos.
Hasta hace unos años, los gobiernos obtenían estos productos de los excedentes agrarios. De hecho, los fondos europeos utilizados para este fin están todavía vinculados a la política agraria común. Sin embargo, en los últimos años, la práctica desaparición de estos excedentes ha obligado a los gobiernos a adquirirlos directamente en el mercado. Este es el trámite que, en España, se inició el 21 de enero con la publicación del correspondiente anuncio el Boletín Oficial del Estado.
Sin embargo, ni siquiera una vez superada toda la burocracia europea y salvado el tránsito por los despachos del Gobierno se agilizó el trámite. La ley de Contratos del Estado, a la que también está sujeto este procedimiento de compra, añade al menos cuatro meses más de demora.
Tras la publicación del anuncio en el Diario Oficial de la Unión Europea -porque este es un procedimiento abierto a todas las empresas comunitarias- deben transcurrir 24 días. Esto significa que el plazo de presentación de las proposiciones terminó a principios de este mes, el 6 de febrero. Cumplida esta fecha, la Administración tiene quince días para realizar la adjudicación provisional, que todavía dispone de cinco días más para formular la resolución motivada del acuerdo adoptado por la mesa de contratación.
Una vez publicada, la adjudicación no tendrá carácter definitivo como mínimo hasta quince días más tarde. Diez días más serán los necesarios para hacer la notificación formal de la adjudicación. Finalmente, el ganador del concurso dispone de tres semanas para empezar la distribución efectiva de los alimentos.
El propio ministerio admite que este procedimiento "condiciona notablemente la fecha de distribución de los alimentos".
La Vanguardia (27.02.2009)
Sé el primero en comentar en «El Gobierno tarda diez meses en comprar alimentos para las familias necesitadas»