El paro afecta al transporte público y al tráfico aéreo. Los sindicatos exigen ayudas a los trabajadores y no sólo a la banca y la industria
París. (Agencias).- El transporte público en las grandes ciudades y los aeropuertos de París son los más afectados por la jornada nacional de protesta contra la política económica y social del gobierno francés, la primera gran prueba que enfrenta a los sindicatos con el presidente Nicolas Sarkozy.
Los sindicatos franceses protestan contra el apoyo unilateral que, en su opinión, el Estado francés brinda a los bancos y la industria mediante el paquete de medidas para reactivar la coyuntura económica. Exigen gastos masivos del Estado para ayudar también a los trabajadores y desempleados a afrontar las consecuencias de la crisis.
La aerolínea francesa Air France ha anunciado la anulación del 30% de sus vuelos previstos en el aeropuerto parisino de Orly, y el 10% de los del Charles de Gaulle. En el caso de Orly, un 35% de los vuelos de todas las compañías ha sido anulado. Los que están operando registran, de media, unos 30 minutos de retraso en los dos aeródromos de la capital francesa.
También se están notando los recortes fijados por los sindicatos en los servicios de metro, autobuses y trenes de cercanías, que funcionan en torno al 60-70% de su capacidad.
La circulación por carretera está siendo más fluida de lo habitual en las principales autopistas de entrada a París, informó el Centro Nacional de Información y Coordinación de Tráfico.
Se espera una protesta multitudinaria
Miles de franceses saldrán a la calle en distintos puntos del país para protestar por la política económica del Gobierno y para exigir el mantenimiento de su poder adquisitivo.
El acto principal de la jornada tendrá lugar a primera hora de la tarde en París, donde los líderes sindicales encabezarán una marcha por el centro de la capital francesa que se prevé multitudinaria.
Los sindicatos pretenden hacer llegar al Gobierno la voz de la calle a favor del empleo y de los servicios públicos, y en defensa de una política de impulso a los sectores más afectados por la actual crisis económica.
"El Gobierno debe responder" y actuar de forma responsable, advirtió Jean Calude Mailly, el secretario general de Fuerza Obrera (FO), quien subrayó en unas declaraciones a Canal+ que los sindicatos no quieren repetir una protesta como la de hoy cada semana.
Los trabajadores de la administración, del sector educativo, de la justicia, de hospitales, de la banca o de correos están también llamados a este paro de movilización interprofesional.
El apoyo de la población francesa a la jornada nacional de protesta es el mayor que ha tenido ninguna huelga en Francia desde 1995. Los sondeos indican que siete de cada diez franceses respaldan las acciones de protesta.
La Vanguardia (29.01.2009)
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