La cumbre de la naturaleza debate una moratoria a los biocombustibles

BiocombustiblesEl comité español de la UICN denuncia los impactos de los agrocombustibles

Empresas basadas en la naturaleza en países pobres se benefician del mercado solidario

Antonio Cerrillo – Barcelona.- La batalla de muchas organizaciones sociales y ecologistas contra los biocombustibles (también llamados agrocombustibles) se ha trasladado al congreso de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN). Y es un frente relevante, pues esta organización – formada por gobiernos, agencias oficiales y diversas ONG – es la que marca las directrices de protección ambiental en todo el mundo. Diversas delegaciones han apoyado una propuesta de moción en la que se solicita una moratoria a la expansión industrial de los monocultivos de agrocombustibles (para bioetanol y biodiésel) por sus impactos ambientales.

Los cultivos energéticos (soja, palma, caña, maíz…) irrumpieron como una fuerte opción para suplir a los combustibles fósiles y reducir las emisiones de gases invernadero, pero cada vez cosechan más rechazo. La propuesta ha sido lanzada por diversas ONG y cuenta con apoyos en apoyos en países de varios continentes, según explicó Carlos Sánchez, presidente del comité español de la UICN. "La idea de establecer una moratoria a la expansión industrial de los agrocombustibles se debe a que está generando unos impactos durísimos; no es el caso de Europa, pero sí se da en grandes explotaciones en Indonesia o en Sudáfrica, donde se están ocupando grandes extensiones de llanuras y donde al final se están provocando más emisiones de gases al desaparecer zonas boscosas", dijo Carlos Sánchez. "La idea de que los biocombustibles son una solución al cambio climático es mitología. Cuando se hace el balance energético y económico de la producción, se ve que su producción es inviable a gran escala, con excepciones como las de la caña de azúcar en Brasil, porque también necesitan energía, agroquímicos, tecnología y una inversión de capital que dan un resultado que no compensa", declaró Jorge Cappato, presidente del comité de la UICN de Sudamérica. "Nos preocupa tanto la posible incidencia de los agrocombustibles en la subida de los precios de los alimentos como el desplazamiento que causan en las áreas de cultivo tradicional. Así, se ha visto en los monocultivos de Sudamérica. Además, debido al uso de productos químicos, contaminan las aguas, agotan el suelo fértil y producen una transformación masiva del ecosistema, incluso sobre áreas protegidas", agregó Cappato. La viabilidad de esta propuesta de moratoria es incierta, pues otros sectores promueven una propuesta más moderada, en la que sólo se solicita a la UICN que propicie un informe independiente sobre los impactos de este modelo agrario. El ejemplo contrario lo recoge el último Informe sobre Recursos Mundiales, y en el que se da cuenta de algunas de las más interesantes experiencias para conseguir que la pobreza no destruya el medio ambiente. El planeta sigue teniendo 2.600 millones de personas con menos de dos dólares al día, pero numerosas comunidades locales han aprendido a invertir en empresas que han sabido aprovechar el capital y los beneficios de la naturaleza. Benson Venegas, de la cooperativa Talamanca de Costa Rica, explicó que su región se vio empobrecida por una plaga que acabó con el cacao, el monocultivo del que dependían desde los años 60. "Para superar esto, decidimos diversificar y producir cacao ecológico, de manera que ahora es el mejor pagado del mundo. También exportamos bananas y frutas que nos reclaman en Europa para jugos de cinco frutas, con propiedades antioxidantes muy apreciadas. Y hemos ampliado la producción de cultivos para ganar seguridad alimentaria local", dice Venegas. "Hemos entrado en el mercado solidario; nos pagan no sólo una materia prima, sino un producto que tiene un valor ambiental, una imagen, un sabor y un sentimiento. Por eso, recibimos un porcentaje del beneficio por la comercialización", agrega. Manish Bapna, vicepresidente del World Resources Institute, dijo que "las comunidades locales tienen interés en sostener los ecosistemas de las que dependen" y pueden hacerlo con tres requisitos: tener la propiedad de la tierra, capacitación y acceso a los mercados.

La Vanguardia (9.10.2008)

Sé el primero en comentar en «La cumbre de la naturaleza debate una moratoria a los biocombustibles»

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.


*


Traducción »