"Soy una mujer muy positiva y vitalista:siempre le encuentro el lado bueno a las cosas"
LA EX SOCIALISTA ESTÁ SEGURA DE QUE "MUCHÍSIMA GENTE QUIERE OTRA POLÍTICA"
Detrás de esa apariencia de mujer frágil, se esconde una mujer muy fuerte y que ha sufrido muchísimo por defender sus ideales políticos. Rosa Díez, ex militante del PSOE, ha conseguido dejar a un lado su pasado y formar su propio partido, que ha obtenido unos resultados inmejorables. Pero Rosa no reniega de lo que ha sido hasta ahora: Tengo muchos amigos, he militado en el PSOE toda mi vida, y he representado a mucha gente fantástica, por eso tomar la decisión de que no tiene arreglo es doloroso, es una especie de fracaso personal , nos cuenta la diputada de Upyd desde su despacho en el Congreso de los Diputados.
-¿Esperabas obtener un escaño en las elecciones generales?
-Teníamos la intuición cuando creamos el partido que respondíamos a una demanda de un partido nuevo y de una manera de hacer política distinta en España. En ese sentido, creíamos que había un espacio para entrar en el congreso de los Diputados. Lo de los votos no lo sabíamos, pero nos dimos cuenta de que ers extremadamente complicado el penetrar en la población a través de los medios de comunicación en una campaña tan polarizada como fue la de generales, sin recursos y sin que los bancos nos prestaran nada, además de sin sedes físicas.Resultaba casi milagroso llegar a la gente. Según fueron pasando los días, nos dimos cuenta de que por la calle había cantidad de gente deseando tener una opción distinta a la que votar.
-¿Cuál crees que es la base del éxito que habeís tenido?
-Yo creo que muchísima gente quiere otra política. Muchísimos ciudadanos que a lo largo de su vida han votado a otras opciones políticas, o sencillamaete no han votado, que están hartos de los cárteles en los que se habla de sus cosas pero no de las que interesan a los ciudadanos. están más preocupados en resolver sus negocios que en los problemas que existen, y fomentan la bronca permanente que nos obliga a pensar que la mitad de España estaba enfrente de la otra mitad. Creo que hay muchísima gente que tiene un espacio, que es la tercera España, son ciudadanos que en unas cosas están más de acuerdo con uno, en otras con otro, pero que no consideran a nadie su enemigo. La clave del éxito es que hemos venido a responder a una demanda, no a generarla. A permitir que la gente recupere la ilusión, que es una palabra poco relacionada por la política. Cantidad de personas de todas las edades me han dicho que les he hecho recuperar la ilusión por la política.
-¿Te ves ganadora de unas generales?
-No hemos nacido para ser bisagra, sino para ser alternativa. No sé cuándo tocará o si tocará, pero en España hace falta una alternativa a los dos grandes partidos, y no una bisagra. Necesitamos gente no sectaria,que tengan un sentido institucional de la política, que sea capaz de ir al Congreso de los Diputados y escuchar, y cambiar incluso de posición cuando encuentra argumentos interesantes. Yo creo que en el siglo XXI, los viejos partidos están caducados en toda Europa. Lo que producen son la frustración de la gente y un divorcio de la política, que es lo que me dice mucha gente que le está pasando. Creemos que en el siglo XXI necesitamos partidos como este, en el que militen personas como yo, de la izquierda no dogmática, social demócratas, de los del liberalismo de las Cortes de Cádiz.
"ME FUI DEL PSOE CUANDO LLEGUÉ A LA CONCLUSIÓN DE QUE ERA INÚTIL SEGUIR CON LA BATALLA DESDE DENTRO"
-El PP te acusó de haber copiado su ideario político. ¿Qué tienes que decir a eso?
-Sólo le digo a la gente que mire los dos programas electorales, y sobre todo que nos mire por lo que hacemos. Yo apelo al libre albedrío, quiero que los ciudadanos se acerquen a nosotros con un pensamiento crítico y libre, no de seguidores forofos. Si les parece que hay otro que hace lo mismo y lo hace mejor, que voten al otro, así de sencillo.
-¿Cuál fue el detonante que te hizo abandonar el Partido Socialista?
-Yo me afilié a un partido político hace más de treinta años que tenía como seña de identidad más característica la de ser un partido con un sentido de Estado y sentido institucional, un partido que vertebraba España, lo que significa que tener la misma posición política en lo sustancial. Era un partdo marxista, luego hacía la social democracía, pero nunca dejó de ser un partido con sentido de Estado. En los últimos años, yo empecé a observar que había dejado de lado lo que era fundamental para garantizar la igualdad de todos los españoles. Estos últimos cuatro años yo aprecié la deriva, y lo fui denunciando, no sólo en el tema de la política antiterrorista, sino en el modelo territorial del Estado y también el abandono de todos los grandes consensos, que habían servido para que España se consolidara . Yo he ido haciendo un discurso crítico, argumentado de la mejor manera que sabía, sin descalificaciones personales, creyendo que desde dentro iba a ser capaz de que ciertas personas que en privado decían lo mismo que yo, lo dijeran en público. Me fui del PSOE cuando llegué a la conclusión que era inútil seguir con esa batalla desde dentro, ya que quienes en privado decían una cosa, decían otra en las reuniones del Comité Federal, se callaban. Me fui por uns entido de utilidad, y no porque me hicisesn la vida imposible. A ver, es cierto que en el PSOE había algunos que no me querían mucho, pero también es incómoda la vida en el País Vasco y no me he marchado. Tengo muchos amigos, he militado en él toda tu vida, y he representado a mucha gente fantástica, por eso tomar la decisión de que no tiene arreglo es doloroso, es una especie de fracaso personal.
-¿Te has sentido identificada con María San Gil ahora que ha dejado el PP por discrepancia de ideas?
-Yo creo que son experiencias vitales muy distintas. Me siento identificada en el sentido humano con ella porque ha sufrido mucho. Pero María llegó a la política de una manera totalmente distinta a la mía, se podría decir que ella no tiene vocación política, ya que a ella no le apasionaba la vida política como a mí, desde que era una cría. Ella llegó por un sentido del deber, y yo por una pasión, porque realmente me gusta la política. María llegó porque mataron a su compañero mientras comía con él, se sintió en la obligación de dar un paso al frente en vez de dar un paso atrás, y así llegó a todo. Romper con todo eso ha debido ser dolorosísimo para ella y tengo una enorme empatía personal y humana con ella, aparte de que le tengo muchisimo cariño y siento mucho lo que le ha pasado. Además, creo que le han maltratado quienes más respeto le deberían de haber tenido aunque no hubiesen estado de acuerdo con ella. La política y la vida a veces son muy crueles.
-¿Qué crees que le sobra, o que le falta, al PSOE actual?
-No me interesa el PSOE de Zapatero ni el PP de Rajoy, analizo sus posiciones, sus decisiones políticas, las critico o las aplaudo pero ellos que organicen su partido. No me gusta la critica generalizada, sólo opino cuando dicen algo importante y que no tiene que ver con lo orgánico.
En el PSOE se está produciendo una adaptación a un tiempo nuevo en relación con la política europea, la política europea se esá derechizando en el sentido de tirar por la borda algunas de las conquistas sociales que nos han costado decenas de años conseguir, y el PSOE no es ajeno a eso. Tanto ir al centro nos estamos cayendo por los bordes: todo el mundo camina hacia él, aunque no sé lo que es, pero parece que todo el mundo lo quiere alcanzar. A mi me da miedo que el centro sea un agujero negro y que todos se caigan en él.
"SOY VASCA PORQUE SOY ESPAÑOLA, LOS SENTIMIENTOS NO TIENEN CARÁCTER POLÍTICO"
-¿Cómo te definirías?
-Soy una mujer muy vitalista, positiva, en el sentido de encontrar siempre algo bueno en todas las cosas que ocurren. No me gusta dar ninguna batalla por perdida, a pesar de que he perdido muchas.Cuando pierdo una sé que ha empezado la siguiente. Soy muy positiva en ese sentido. Soy muy alegre, amiga de mis amigos.
-¿Te consideras políticamente correcta o consideras que con ciertos temas no se puede serlo?
-Yo soy políticamente incorrecta, soy una heterodoxa, en el sentido amplio de la palabra políticamente, lo soy en todos los ámbitos de la vida.
– ¿Eres en casa igual que como se muestra en la televisión?
-Creo que soy bastante parecida, más vaga igual… Bueno, tampoco más vaga, en mi casa se quejan de lo contrario…Soy muy activa, y los fines de semana que puedo estar en casa es cuando pienso, cuando escribo, me tumbio en el sofá…Suelo hacer las cosas que hace todo el mundo. En casa soy Rosa Díez con vaqueros y una camiseta pero igual.
-¿Qué te gusta hacer para desconectar?
-Yo desconecto facilísimamente, nunca he tenido ningún problema en el sentido de hacer otra cosa. Leo, oigo música, charlo con gente que no tiene nada que ver con mi mundo., voy a conciertos y al cine, aunque poco, pero es lo que me gustaría hacer habitualmente. Estuve en el concierto de Escorpions hace muy poco! Tengo muchísima facilidad cuando termino de trabajar, coger un libro de poesía o una novela negra, que es lo que más me gusta.
-¿Te has planteado alguna vez dejar la política por el miedo a lo que pudiese suceder?
-Cuando mis hijos eran pequeños, si que nos planteamos mi marido y yo si teníamos derecho a obligarles a vivir en las condicieones en las que lo tendrían que hacer por el hecho de ser nuestro hijos, sin privacidad, en una soiedad muy polítizada en el sentido negativo del término… Nosotros habíamos elegido, pero ellos no podían hacerlo. Sí que nos lo planteamos, pero no teníamos miedo por nosotros. Llegué a la concluisón de que precisamente porque tenáimos hijos, tenía que seguir en ello.
-¿Tus hijos nunca le han pedido que deje lapolítica?
-Mis hijos han sido muy generosos conmigo, en el sentido de muy solidarios, muy cómplices, siempre están apoyándome. Y eso lo han pagado. Jamás me han dicho que lo deje, y si lo han hecho ha sido no desde la perspectiva de la política, sino en el sentido protector. Mis hijos han pasado mucho miedo por mí y nunca me lo han dicho, lo he tenido que descubrir yo cuando eran mayores. Yo les he quitado privacidad, pero ellos han sido muy buena gente.
-¿Cómo viven tus hijos la situación en el País Vasco?
-Mi hija se fue a vivir a San Sebastián para conseguir tener un ambiente más privado, y mi hijo trabaja por la zona norte, aunque vive a caballo en nuestra casa. Tiene también un apartamento de San Sebastían. Toda la vida hemos vivido esto, nunca nos hemos planteado marcharnos de ahí. Hemos pasado muchos momentos buenos, pero momentos muy duros también. Hacer política en el País Vasco sin ser nacionalista es muy difícil. Hay momentos muy duros, cuando te matan a un amigo, por ejemplo. Siempre que hay un atentado es muy muy duro siempre. No shan matado demasiados amigos, hemos borrado demasiados números de la agenda telefónica en el País Vasco. Eso nos ha hecho como somos, y a mucha gente eso le ha obligado a irse, lo cual requiere muchísimo valor. Todo el que se va deja jirones, se siente mal. Algunos llegan a un momento en el que no pueden más y se van, otros seguimos, aunque igual nos vamos, antes de caer en el síndrome de Estocolmo. Pero mientras creas que todavía se puede hacer algo, eso sigue mereciendo la pena. Los buenos no son los que me han votado, sino que son la inmensa mayoría.
-¿Qué represalias has sufrido por dedicarte a la política?
-En mi blog cuento lo que nos pasa a todos lo que nos dedicamos a la política en Euskadi. Yo no he vivido nunca en libertad nunca, la mitad de mi vida fue por el régimen fascista, y el resto lo he vivido bajo un totalitarismo nacionalista. Nunca he disfrutado de la libertad de expresión ni de la de movimiento. Yo tengo que ir con escolta, o sea que los derechos constitucionales básicos hay muchos vasco que nunca los hemos disfrutado. En aquellos artículos básicos, en el País Vasco no han tenido aún una oportunidad.
-¿Cuál crees que es la solución para acabar con el terrorismo en el País Vasco?
-La democracia terminará con el totalitarismo y el terror. Eso significará que la constitución tendrá una oportunidad, también el el País Vasco, y no nacerán más niños huérfanos porque el terrorismo ha asesinado a sus padres, ni habrá gente que cada mañana tenga que mirar cerca del coche. Ni habrá mayores que den sprays a los jóvenes para que pinten dianas con las caras de otros niños…Hay personas que son víctimas vivas y sólo salen en los periódicos cuando los matan, como fue el caso, por ejemplo, de Isaías Carrasco.
-¿En qué lengua hablas en tu casa?
-Yo hablo castellano, y no sé euskera, vivo en una parte del País Vasco donde nunca se ha hablado el euskera. Mis hijos sí, pero Diego no lo habla porque cuando terminó de estudiar olvidó todo lo aprendido, ya que consideró que le habían obligado a entenderlo. Mi hija sí que lo habla perfectamente. Pero se trata de levantarte contra la discriminación que muchas familias sufren al intentar escolarizar a sus hijos. Es algo tan obvio que me llama poderosamente la atención. Dijo Zapatero que el mejor manifiesto es la Constitución. Me parece de una frivolidad extraordinaria, porque también proclama la igualdad de los hombres y de las mujeres y hemos hecho una ley para garantizar la igualdad entre los sexos. Hemos presentado una iniciativa legislativa amaparándonos en el Artículo 149, precisamente para usar la lengua que tú quieras. Con respecto al manifiesto, Zapatero se empeña en decir que es a favor de la lengua española, y no es así: es a favor de la no discriminación del castellano. Desde la transicición no había un manifiesto que concitara las adhesiones de peronas tan diferentes y de tantos ámbitos
-¿Qué echas de menos de ser un personaje desconocido?
-La verdad es que no pienso en ello, por que soy lo que soy porque quiero serlo, yo lo he elegido, y me gusta mucho lo que yo hago. No pienso en cómo sería mi vida si me dedicara a otra cosa.
-¿Hay algún político al que admires?
-A Churchill por ejemplo, y a Julián Besteiro… Porque fue un hombre libre, con un profundo sentido institucional de la política. Era un español cabal. Y a Churchill porque supo ver que al totalitarismo sólo se le puede vencer, y nunca se puede pactar con él.
-¿Te consideras antes vasca o española?
-Soy vasca porque soy española, los sentimientos no tienen carácter político. Tú te sientes lo que te de la gana…pero eres española.
-¿Qué planes tienes este verano?
-Pues me voy a tumbar el sol y no me voy a levantar hasta que terminen mis vacaciones. Me voy a Chiclana, sólo con mi marido. Mi hijo tienen 32 años el mayor y 24 mi hija pequeña, tienen su vida. No van de vacaciones a papá y mamá, aunque ya me gustaría…
europapress, 17/07/08
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