Con «F» de Fráncfort y de Félix

Dos Félix para hablar de Fráncfort, sólo que uno entiende el desembarco catalán en la feria con «f» de fama y el otro lo visualiza con «f» de fracaso.

Dos semanas después de que cerrara sus puertas la Feria de Fráncfort y que la escuadra catalana regresara a sus cuarteles de otoño, y a la espera de que los responsables del Institut Ramon Llull comparezcan en el Parlament para dar cuenta de todos y cada uno de los euros que se gastaron para hacer posible el desembarco, la hoguera de la polémica que enfrentó a escritores catalanes en castellano y en catalán parece que todavía no se ha apagado.Y aunque la polémica se plantee, como ayer ocurrió entre el escritor Félix de Azúa y el editor Fèlix Riera en Tribuna Barcelona, desde el diálogo, el puente que se rompió con la decisión de ERC de dejar fuera del encuentro editorial a los autores catalanes en castellano parece difícil que se pueda volver a construir.

No obstante hay matices: De Azúa ve la distancia prácticamente insalvable, Riera parece apostar por el se hace camino al andar, mejor si es de la mano y con los números muy presentes. Así, el responsable de Grup 62 recordó que en 2006 la industria editorial catalana edito más de 31.000 títulos, de los que el 28% están escritos en catalán y facturan cerca de 245 millones de euros; también esgrimió Riera el dato de que actualmente, de cada cinco libros que se venden sólo uno está escrito en catalán; pero argumentó que, desde su empresa, los datos no se ven como signo de «parálisis» sino que «hemos detectado una oportunidad de crecimiento». No obstante, admitió que acciones políticas como la presencia de la literatura en catalán en Fráncfort sirven «como elemento corrector» y que gracias al desembarco se ha conseguido reposicionar a los autores en catalán, tanto dentro como fuera de Cataluña. Y concluyó: «La presencia catalana en Fráncfort no ha restado nada a España sino que ha servido para sumar muchas cosas» .

«Me congratulo de que la feria haya sido un éxito, aunque no recuerdo ninguna feria que no lo haya sido», arrancó De Azúa su discurso tras escuchar los muchos datos y argumentos que Riera enumeró. «Estoy feliz de que los colegas en catalán tengan éxitos, pero no entiendo como todos, excepto Sergi Pàmies, han aceptado participar porque cuando el invitado fue España fuimos muchos los que no aceptamos tomar parte de aquel aparato patriótico», añadió De Azúa, que intentó así explicar su reciente acusación de «servilismo» hacia los autores que habían acudido: «Es como si los escritores se convirtieran en funcionarios y ninguno se hubiera negado a ser utilizado», apuntó.

Elite y resistencia

De igual manera, Azúa apuntó que «las elites quieren que en Cataluña se hable en exclusiva catalán, pero se encuentran con la resistencia de los catalanes». Y apuntó que ante tal dicotomía sólo había un camino: «Exigir la independencia en los mismos términos que el País Vasco»; aunque ello cree un problema porque, aseguró, provocaría una «energía» que sería «incontrolable». No obstante, más adelante, el escritor precisó que esa declaración de independencia es «una ruptura unilateral que no interesa a nadie, ni a los propios independentistas».

El debate de Tribuna Barcelona, pese al resquemor que la cuestión despertó y mantiene entre la sociedad cultural y política catalana, no reunió ayer, como era de prever, al grueso de la intelectualidad ni de la política catalana. Estuvo el ex conseller de Cultura y actual responsable de audiovisuales de RBA Ferran Mascarell y también la editora de Ediciones B Ana Maria Moix. Pocos más.Tampoco acudió Josep Bargalló, responsable del Ramon Llull, organizador del desembarco, aunque delegó en la directora adjunta Neus Fornells, y el responsable del Area de Humanidades Carles Torner.

APOYOS

«F» DE FRACASO

«El idioma no debería primar como elemento de identidad primario, porque idealiza una sociedad que no existe, porque la sociedad catalana es bilingüe».

«Tengo la misma sensación que con McLaren, que sólo siente orgullo por Hamilton. Aquí también hay un favorito y los 'fernando alonso' estamos que nos subimos por las paredes»

«Una ruptura unilateral no le interesa a nadie, ni siquiera a los independentistas porque entonces no tendrían independencia que defender».

«F» DE FAMA

«Desde Grup 62 apostamos tanto por nuestros dos sellos en castellano, El Aleph y Península, que el próximo mes de enero abriremos sede en Madrid, en el centro, en la Gran Vía, en la plaza de España».

«Estoy a favor de la libre competencia y creo que la literatura en catalán tiene que guardar lectores en las mismas condiciones que la literatura en castellano».

«La Feria de Fráncfort nos ha servido para tomar conciencia de la situación actual de Cataluña».

El Mundo (31.10.2007)

Sé el primero en comentar en «Con «F» de Fráncfort y de Félix»

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.


*


Traducción »